XLVIII Concierto de Música Festera

Tradicionalmente, durante años y años, el jueves víspera del inicio de los tres días grandes de las Fiestas de Moros y Cristianos de Cocentaina, el Patio de Armas del Palau Comtal se llenaba de contestanas, contestanos y gentes venidas de fuera de la villa Condal para disfrutar del extraordinario Concierto de Música Festera a cargo de la Banda de la Unión Musical Contestana. Pero este año 2020, el año de la pandemia del covid-19, ha sido muy diferente. Para empezar, habiéndose suspendido las Fiestas de Moros y Cristianos, la Junta Directiva acordó trasladar el concierto al viernes día 31 de julio. Además, el Patio de Armas no lució pleno de público, sino que por razones de limitación de aforo impuestas por las normas sanitarias, solo ciento veinte personas pudieron disfrutar en persona del concierto de la Banda. Otros muchos pudieron seguirlo a través de las ondas de Radio Cocentaia y a través de las redes sociales merced a la transmisión realizada por Tele Cocentaina.

En estos momentos de incertidumbre sanitaria, cuando nuestra sociedad todavía sufre los efectos de la pandemia y las consecuencias económicas son una incógnita pero auguran un futuro difícil, la banda ha querido dedicar este concierto al pueblo de Cocentaina, a su gente, a sus Fiestas y a su música, como una señal de esperanza y un deseo de que todos juntos superemos esta situación. Por ese motivo el programa que preparó la Banda también se salió de lo ordinario. Todas las piezas que conformaban el programa eran de autores contestanos o dedicadas a Cocentaina y forman parte del repertorio tradicoinal de la Banda. Música del poble i per al poble.

Tras unas breves palabras de bienvenida de la presentadora María Nives Pascual, en las que también resaltó la excepcionalidad de la situación, se inició el programa del Concierto con la interpretación, bajo la dirección del Director titular de la Banda, Ferrán Sanchis Gandía, de Cocentaina, pasodoble dianero de Nicanor Hidalgo Velasco, compositor que, si bien no es nacido en la villa Condal, le dedicó esta pieza al pueblo de Cocentaina. Si hay un compositor emblemático de la Unión Musical Contestana, ese es sin duda José Pérez Vilaplana, no en vano fue el director de la banda durante veintiséis años, siendo su Director Vitalicio hasta su fallecimiento en 1998. Por eso, en el programa del Concierto no podían faltar las obras del Mestre de la Música, como era popularmente conocido. En primer lugar la banda interpretó Zoraidamir, marcha cristiana compuesta en 1969 que obtuvo el segundo Premio en el VI Festival de Música Festera de Alcoy, siguiendo con Als Berebers, marcha mora compuesta en 1972 y dedicada a la Filá Bereberes “Els Borts” de Cocentaina, que obtuvo el segundo premio en el Primer Concurso de Música Festera de Villena.

A continuación la banda, siempre bajo la dirección de su Director Titular Ferrán Sanchis Gandía, interpretó, Joano Bartolo, pasodoble de Rafael Lledó García, músico jubilado de la Unión Musical Contestana, compuesto en 1983 y estrenado en el Concierto de la Fira de Tots Sants celebrado por la banda ese mismo año. Otro compositor contestano que no podía faltar en el programa del Concierto dedicado a la Música de Fiestas y al pueblo de Cocentaina es Gustavo Pascual Falcó. Autor del pasodoble Paquito el Chocolatero, de reconocida fama internacional, Gustavo Pascual Falcó nació en Cocentaina en 1909, fue músico clarinetista, subdirector de la Banda y presidente de la Unión Musical Contestana, falleciendo a la edad de treinta y siete años, dejando, a pesar de su juventud, un importante repertorio de música con obras como la mentada Paquito el Chocolaterio, el pasodoble El bequetero o las marchas moras, Buscant un Bort o Navarro el Bort, entre otras muchas. En este ocasión, la obra del compositor contestano elegida para su interpretación por la banda fue Navarro el Bort, con la que se puso fin a la primera parte del Concierto.

Durante el intermedio y sin que público ni músicos abandonaran sus sillas por razones de prevención para evitar aglomeraciones, se aprovechó para que la presidenta de la Unión Musical Contestana, Neli Jover Sellés, tomara la palabra y diera las gracias al público por su asistencia al concierto, así como a los que lo estaban siguiendo a través de las redes sociales y, en especial, a la Junta Directiva de la Sociedad Musical y a los músicos que, en esta difícil situación, con importanes dificultades, pero con mucha ilusión y voluntad, habían podido preparar este Concierto dedicado al pueblo de Cocentaina, teniendo un recuerdo también para los festeros que por desgracia este año no podían celebrar las tradicionales Fiestas de Moros y Cristianos. A continuacón tomó la palabra Juan Francisco Masanet Vall, nuevo presidente de la Federación Junta de Fiestas de Moros y Cristianos de Cocentaina, que agradeció a los músicos el esfuerzo dedicado en la preparación del Concierto y recordó la significación y la relevancia que la banda de la Unión Musical Contestana tiene en todas las Fiestas de Moros y Cristianos en las que participa.

Sin solución de continuidad, comenzo la segunda parte del concierto con la interpretación de Reme Orts, pasodoble de Vicente Cortés Fernández, compositor y músico jubilado de la Unión Musical Contestana, pieza dedicada a su esposa; continuando con otro de los compositores de la Unión Musical Contestana, Francisco Valor Lloréns, músico percusionista y subdirector de la Banda. Nacido en Cocentaina en 1979, Francisco Valor se ha convertido en un referente en la actual Música de Fiestas y es muy amplio y de calidad el repertorio que atesora, pero la Unión Musical decidió interpretar una pieza emblemática tanto para el propio compositor como para la Banda: Creu Daurà. Esta marcha cristiana fue un encargo de la Filá Cresuats de Cocentaina en el cincuenta aniversario de su fundación y la Unión Musical la estrenó en el Concierto de Fiestas del año 2002 y supuso la consagración de Francisco Valor como compositor de Música Festera. Además, esta marcha cristiana da nombre al disco compacto que la Unión Musical grabó en el año 2007 con piezas del compositor conterstano y con el que la banda recibió el premio Euterpe a la mejor grabación otorgado ese año por la Federación de Sociedades Musicales de la Comunidad Valenciana.

Enrique Torró Insa, músico militar y compositor contestano nacido en 1922, es otro de los compositores vinculados a la Unión Musical Contestana hasta su fallecimiento, habiendo sido nombrado Director Honorífico y Perpetuo de su Banda. Amplio es el repertorio de música de Enrique Torró, siedo quizás su pieza más popular la marcha militar Caballería Ministerial, si bien la Unión Musical Contestana decidió interpretar otra de sus composiciones más conocidas, el pasodoble Antonio Pérez Francés, por ser una excelente muestra de los pasobles festivos y elegantes propios de la Diana contestana. Seguidamente la banda interpretó Santos, Poetas y Guerreros, marcha cristiana de Enrique Igual Blasco, músico de la Unión Musical de la que fue también su director y actual fagot solista de la Banda Municipal de Alicante. Esta pieza compuesta en el año 2001 tiene también una especial significación para la Unión Musical Contestana, ya que fue la obra de libre elección que interpretó en el X Certamen de Música Festera de Altea la Vella celabrado en el año 2013 y en el que la banda obtuvo el primer premio.

Pero si una pieza identifica a la banda de la Unión Musical Contestana allí donde va, es sin duda A mos pares, marcha mora del mestre José Pérez Vilaplana. No en vano es la banda de la Unión Musical Contestana la designada en sus últimas voluntades por don José Pérez como la única banda que podía interpretarla, así como su pasodoble Bohemios del 29. Las notas de esta marcha mora invadieron el patio de Armas del Palau Comtal cerrando un programa preparado con mucho cariño por el director titular Ferrán Sanchis con la colabración del subdirector de la banda Francisco Valor y de la Junta Directiva.

Como no podía ser de otra forma, el Concierto finalizó con la interpretación del Himno de Fiestas, Visca la Festa, música de José Insa y letra de Gerardo Mur, y cuando los ecos de la última nota quedaron suspendidos en el aire y el director bajo la batuta, el público asistente, puesto en pie, agradieció a los músicos el esfuerzo y cuidado puesto en la preparación del concierto y su extraordinaria interpretación con una larga ovación que no pareció tener fin.

Fdo. José Luis Muñoz Huércano

Vicepresidente UMC

[:]